Salsa de Fresa Casera – Descalzo en la Cocina

Con su brillante sabor a bayas, su impresionante color rojo y su textura suave y aterciopelada, la salsa de fresa casera supera cualquier cosa que puedas comprar en la tienda.

Salsa De Fresas Casera

Si bien espero con ansias la temporada de bayas durante todo el año, esta salsa también se puede (y a menudo se hace) con bayas congeladas. Entonces, si no puede conseguir bayas maduras perfectamente dulces en este momento, no se preocupe.

Todavía hay un montón de salsa de fresa casera en tu futuro. Hacer la salsa es tan simple como combinar las bayas, un poco de azúcar y el jugo de limón en una cacerola. ¡Tan fácil!

Llevar a ebullición y cocine a fuego lento durante unos minutos. Hazlo lo más fácil posible y lo disfrutarás todo el año.

Salsa Fresca Fresca

Una vez que hayas intentado hacer un dip de fresas frescas (¡y lo hayas probado!), quedarás enganchado. Afortunadamente, esta es una salsa tan versátil que te encontrarás vertiéndola sobre todo tipo de cosas.

Rocíe salsa de fresa fresca sobre panqueques o gofres para un almuerzo que hará sonreír a todos. Agregue una cucharada a un tazón de yogur con granola para un excelente desayuno entre semana.

Caliente la salsa y conviértala en una cobertura de helado de fresa, tal como lo hicimos con esta sencilla salsa de bayas. La salsa de fresa para tarta de queso se puede verter sobre las rebanadas de tarta de queso o revolver en la masa antes de hornear.

Intente usar la salsa de fresa como glaseado para pollo o salmón a la parrilla, las opciones saladas también son geniales.

Receta de salsa de fresa

Solo necesitas tres ingredientes para hacer esta receta:

• fresas frescas
• azúcar
• jugo de limon

La salsa de fresa se puede hacer con fresas frescas o congeladas. Si usa bayas congeladas, déjelas descongelar a temperatura ambiente durante aproximadamente media hora. Agréguelo a la sartén fría y luego tritúrelo un poco antes de comenzar la receta.

Cómo hacer salsa de fresa

Combine las bayas, el azúcar y el jugo de limón en una cacerola a fuego medio. Revuelva constantemente hasta que el azúcar se derrita y la mezcla hierva.

Cuando la mezcla hierva, reduzca el fuego a medio-bajo y continúe cocinando durante unos 8-10 minutos, hasta que las fresas estén blandas. Usa una cuchara de madera para aplastar un poco las bayas mientras se cocinan.

Retire la sartén del fuego. Coloque un colador de malla fina sobre un tazón grande y vierta con cuidado la mezcla caliente a través del colador. Presione las bayas maduras en el colador con una cuchara de madera para liberar la mayor cantidad de salsa posible.

Deje enfriar completamente antes de transferir la salsa a un recipiente hermético y guardarla en el refrigerador.

Si elige no colar la salsa, hará una compota de fresa en cambio. Ambos son excelentes opciones para la salsa de fresa; solo depende de cómo quieras usarlo.